Elige tu quema
Quema I: 3 días
¿Tus calcetines dejan marcas alrededor de tus tobillos?
¿Tienes ojeras o bolsas en los ojos?
¿Has notado que la grasa se acumula alrededor de tu espalda baja y comienza a apretarte el pantalón?
¿Tus extremidades se duermen?
¿Te ves pálido?
¿Estás deshidratado aunque sigues tomando agua?
Quema D: 5 días
¿Te inflamas después de comer?
¿Te estriñes, tienes episodios de diarrea o alternas entre ambos?
¿Tus reservas de grasa se sienten duras y densas?
¿Tienes neblina mental y fatiga?
¿Tu piel se resquebraja, o parece arrugada y vieja?
¿Tu lengua tiene una capa blanca encima?
Quema H: 10 días
¿Tu cabello está seco y crispado?
¿Pierdes cabello en la parte de arriba de tu cabeza, o te crece en lugares extraños, como tu barbilla?
¿Tu aumento de peso ha sido rápido y parece imposible deshacerte de esos kilos de más? ¿Tu libido está desaparecida?
¿Te sientes enojado, irritable o sensible?
¿Tu colesterol está alto?
Así que... si estás estancado, quémalo.
Si llegaste a una meseta, quémalo.
Si quieres pérdida de peso estratégica, quémalo.
Si quieres arrancar una dieta con fuerza, quémalo.
Si retienes líquidos y estás inflamado, quémalo.
Si tienes gases y problemas digestivos, quémalo.
Si tienes problemas hormonales, por el amor de Dios, ¡QUÉMALO!