¿Podía Dara Linnell casarse con un completo desconocido? ¡Pues sí! Necesitaba urgentemente un marido que la librara de su manipulador y tiránico abuelo. Y Zane era perfecto para el trabajo: era joven, valiente... y estaba soltero. ¿Qué importancia podía tener que solo lo hubiera conocido unas horas antes?
De acuerdo, aún no lo amaba, pero estaba totalmente convencida de que ese momento llegaría... en cuanto averiguara algunos detalles sobre él, como de dónde era, cómo se apellidaba... y otras insignificancias.