Natasha de Saugure acudió a Francia por orden de su abuela, emocionada de volver a reunirse con el único familiar que le quedaba con vida. Lo último que se le habría ocurrido era que heredaría una importante propiedad… pero aquello le acarrearía la enemistad de su poderoso vecino, el barón Raoul d’Argentan.
La aristocrática familia de Raoul llevaba siglos enfrentada con la de Natasha, y el arrogante y guapísimo barón no parecía dispuesto a perdonar. Quería a Natasha en su cama, pero no necesitaba una esposa… ¿podría simplemente convertirla en su amante?