Aquella joven inocente e inexperta no tardaría en convertirse en su amante…
Tallie Paget se había mudado a Londres para hacer realidad sus sueños, por eso, cuando le ofrecieron cuidar de aquel elegante apartamento, aceptó, encantada con su buena suerte…
El millonario Mark Benedict se quedó de piedra al volver a su lujoso apartamento londinense y encontrar a Tallie en la ducha de su dormitorio, pero la sorpresa no le resultó nada desagradable. Se sintió atraído por su hermosa e inocente huésped… y Tallie no pudo resistirse a los encantos de Mark…